viernes, 2 de agosto de 2013

"¿Nuevos grupos?, ¿nuevas guerrillas?, 2", por Jorge Lofredo (análisis)


Una mirada retrospectiva a la historia reciente indica que los distintos anuncios que refieren al surgimiento de nuevos grupos armados generan duda, desconfianza y sospecha antes que la posibilidad concreta de enfrentar una nueva vertiente de oposición, disidencia o estrategia revolucionaria. Sin ánimo de reiterar un trabajo anterior (v. “¿Nuevos grupos?, ¿nuevas guerrillas?”, en la página del Centro de Documentación de los Movimientos Armados <http://www.cedema.org/ver.php?id=5747>), la premisa fundamental que rige al presente es que el peor escenario, en cualquiera de las circunstancias posibles, es el del enemigo invisible, aquel que no se le conoce ni del cual tampoco es posible saber ni admitir su existencia; y ello debido a que la funcionalidad de los textos que presentan, o representan, no aclara el objetivo que procuran alcanzar; ya que para este tipo de organizaciones siempre será necesario e imprescindible que coincidan palabras y hechos.

Tanto como genuina expresión de inconformidad política-social o como argumento implantado para desviar el eje fundamental de un conflicto en desarrollo y revertirlo en expresión subversiva, esta situación que hoy se presenta puede asumirse desde múltiples lecturas. Una entre otras implica la disparidad de fuerzas entre un poder local y cualquier comunidad, pero esta última apela a una representación armada inexistente para esgrimir un poder que no tiene o que aún no alcanzó a adquirir; otra es que cuente ahora en forma efectiva con ese poder y su anuncio formará parte de la intención en revertir la actual asimetría de poder. Una tercera es que el recurso armado no es tal, pero se reafirma su existencia para dividir a la comunidad o bien para aislarla y así alcanzar a sojuzgarla. Una más refiere a la táctica/estrategia de un grupo armado real que se presenta con diversos nombres bajo obvias cuestiones de seguridad, por un lado, o bien para representar una lógica más extendida de inconformidad social y política, por otro. Para cualquier caso, la referencia es tanto a una comunidad como al movimiento popular, mientras que por grupo armado no debe asimilarse en forma automática a guerrilla sino a todas las demás expresiones que dirimen sus términos exclusivamente a partir del uso de armas. La diferencia entre grupo armado, que apela al terrorismo indiscriminado, y guerrilla es que sólo esta última requiere de argumentos políticos indispensables para justificar su actuación que, y si así no fuese, perderá su condición de tal.

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Es posible tomar como primer ejemplo de estos grupos efímeros —aquellos que aparecen y desaparecen en un mismo momento y circunstancia o bien que no pueden sostener a lo largo de tiempo los argumentos con los cuales cobraron vida— a quien, finalmente, no puede ser considerado con estas mismas características. Cuando todavía se desconocía que el Comando Popular Revolucionario La Patria es Primero formaba parte de Tendencia Democrática Revolucionaria (TDR), desprendimiento del Ejército Popular Revolucionario (EPR), se adjudicó el ajusticiamiento —por recurrir a la terminología revolucionaria— de José Rubén Robles Catalán en Acapulco, era poco probable considerar este hecho como parte de una circunstancia que tuviese referencia en un atentado político y, menos aún, con la posibilidad real de que un grupo signado por lo ideológico fuese su autor. Sin embargo, poco tiempo después se darán a conocer los pormenores de su ejecución como así también la lógica impulsada hacia el interior y hacia fuera del movimiento armado mexicano, pues a la víctima se le comprobó (y no sólo por grupos armados) una participación directa en la matanza en Aguas Blancas. Este mismo grupo será, tiempo después, el que se adjudicó otro hecho semejante pero ahora contra Miguel Ángel Mesino, líder de la Organización Campesina de la Sierra Sur y por lo que le valió el mote de paramilitar por parte de esta organización social que, bien vale recordarlo, fue la castigada en aquella masacre.

Todo esto sirve para estimar a cada anuncio respecto a su genuinidad o no y cuánto tiene que ver la valoración tanto objetiva como subjetiva que se esgrime de sus acciones a futuro; y, además, si éstas tienen lugar o en cambio sólo se continúan a través del silencio o desaparición. No es lo mismo, para el caso, considerar este ejemplo junto a otros que se han ido reproduciendo y tras lo cual no volvieron a ofrecer respuesta ni respaldo a sus primeras y a menudo únicas comunicaciones. No obstante, y volviendo al punto nodal de la cuestión, no significa tampoco que la continuidad de los textos vuelva genuina a una organización: hace falta que sus dichos y hechos establezcan una referencia coherente entre sí y con lo que aducen representar a través de sus párrafos. Por ello, ni uno ni lo otro sirve para desmenuzar la realidad que embarga en sus iniciativas, como así tampoco pueden considerarse idénticas a cada una de ellas aunque las contenga una situación similar. Una simple enumeración —aunque enfrentando el riesgo de no poder alcanzar un listado exhaustivo y menos aún definitivo— ayuda a correr el velo de invisibilidad que las embarga y además para conocer sentar un precedente sobre esta forma de intervención en el escenario político mexicano. Se hace necesario remarcar que corresponde excluir del mismo a los grupos anarquistas, que por lo menos desde 2009 a la fecha han cobrado notoriedad diversa ya que es posible establecer un patrón delimitado acerca de ellos, pues la diversidad de siglas, su inconexión, su actuación en número ilimitado, sus motivaciones y la existencia fugaz determinada de antemano de las células está orientada hacia otros objetivos, los cuales no alcanzan a ser especificados en el presente.

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Un breve repaso, a modo de recuento de siglas, alcanza para apuntar el siguiente nomenclador bajo algunos ejes primarios.

— Repetición de siglas que en apariencia no tienen que ver una con otras: Sumado al caso del ya mencionado ELN, también puede mencionarse al ERS oaxaqueño, que emitió su primer comunicado en 2001, con el guerrerense, cuyo texto se fecha en diciembre de 2009. El primero se denomina Ejército Revolucionario del Sureste a diferencia del último que se llamó del Sur. También, para el caso, vale la mención de la Triple Alianza Guerrillera Indígena Nacional (TAGIN) utilizada en distintas ocasiones y que, más aún, ésta estuvo conformada por distintas organizaciones, en diferentes ocasiones y con fines específicos determinados, pero también disímiles unos de otros. En Oaxaca, se hicieron conocer varios comunicados de FAS, con distinto tenor y en un lapso más prolongado en comparación al resto (entre 2007 y 2012). En una ocasión se denominó Frente Armado del Sur y en otro Fuerzas Armadas del Sur. Lo destacado aquí es que en un mismo comunicado se llamaron a sí mismos en forma indistinta.

— Siglas contemporáneas semejantes: El caso más notorio fue el de la Organización Revolucionaria Armada del Pueblo de Oaxaca (ORAPO) que en pleno conflicto social detonó unos petardos en el centro de la ciudad, asemejando fonéticamente sus siglas a las de la APPO. Pero también se supo del Comando Jaramillista de la Región Oriente, que apareció en 2004 después que de las acciones político-militares del Comado Jaramillista Morelense, integrante de TDR. En este mismo sentido, se suman los ejemplos del Ejército Revolucionario Insurgente Popular (ERIP), el Ejército de los Pueblos Indios (ERPIS) y el Ejército Justiciero del Pueblo Indefenso (EJPI), todos de notable semejanza con el ERPI, Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente. Junto a ello cabe mencionar el del caso más reciente, ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo), que se dice desprendimiento del EPR. Capítulo aparte merece el Ejército Villista de Liberación Nacional (EVLN), que fue utilizado en dos ocasiones distintas (primero en Aguascalientes), pero que después sirvió para provocar la caída de la primera cúpula del ERPI y, además, con el que se prestó a confusión por su parecido con el Ejército Villista Revolucionario del Pueblo, EVRP, ruptura del EPR.

— Utilización de las mismas figuras históricas: Varios son los grupos que recurren a una misma figura histórica para asumir un posicionamiento público. El caso más destacado es el de Flores Magón. Aparecen así el Ejército Popular Magonista de Liberación Nacional, el Movimiento Armado Revolucionario Ricardo Flores Magón, ambos en el mismo 2012, aunque uno en enero y el otro en diciembre, y donde cada uno señala que se trata del primer comunicado de la respectiva organización. En el caso de la denominación Movimiento Armado Revolucionario vale aclarar que ya hubo de ser utilizada en 2006 en Oaxaca, aunque sin la referencia histórica. Además de ellas, no debe olvidarse a otras organizaciones que no son efímeras, como las Milicias Insurgentes Ricardo Flores Magón, la Unidad Popular Revolucionaria Magonista o el Comando Magonista de Liberación, las cuales estas últimas pertenecen a las estructuras de TDR y, ahora, de la Coordinación Revolucionaria.

— Recurrencia militarizada: El término Ejército se impone en la mayoría de los casos en lo que refiere a la adopción de un nombre organizativo, al cual refieren en 21 ocasiones sobre un total de 57. En seis veces apelaron a Movimiento, en otras tantas a Comando, cinco veces a Frente y es al menos llamativo que entre las que concitaron apenas dos menciones son Célula y Red, en tanto que una sola refiere a Organización. Por su parte, Revolucionario, Armado, Popular/Pueblo, Liberación, Nacional e Insurgente/Insurgencia son los denominadores comunes en la mayoría de los casos, aun por sobre México/Mexicano o Socialista/Socialismo.

— Año y lugar de aparición: De cincuenta y siete ejemplos que dan a conocer su primer texto o mencionan su primera acción, puede discriminarse la tabla siguiente: Una en 2013, cuatro en 2012, cuatro en 2011, cuatro en 2010, siete en 2009, cinco en 2008, cinco en 2007, cinco en 2006, tres en 2005, dos en 2004, dos en 2003, ninguno en 2002, dos en 2001, dos en el 2000 y nueve entre 1996 y 1999. No obstante, respecto al lugar de mención, la tabulación establece que el orden es Guerrero, Oaxaca, República Mexicana, Chiapas, estados del norte de la República y no determinados (desde algún lugar, estamos en todos lados, en todo el país y en toda la república son las menciones habituales).

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Se corre el riesgo de involucrar en un mismo lugar fenómenos emergentes procedentes de situaciones disímiles; sin embargo, el denominador común es que la totalidad de ellas se presentan como organizaciones armadas revolucionarias. Ahora bien, que no haya vuelto a saberse de ellas, ¿significa que decidieron sumergirse en una clandestinidad estricta o, por el contrario, son inexistentes?; y con estos elementos reunidos, de cualquiera de las dos maneras, ¿es posible considerarlas tales como se presentan a sí mismas? Usadas por el narco, por conflictos pre/poselectorales, en el contexto de conflictos sociales, en la dinámica político-militar, como táctica para marcar bases de organizaciones insurgentes, o por cualquier otra razón, lo cierto es que su aparición siempre generará desconcierto antes que la afirmación por alguna nueva forma de expresión armada.

Finalmente, y volviendo a lo mencionado más arriba, sólo cuando el reclamo escrito y las acciones que se emprenden en pos de ese objetivo se correspondan íntimamente entre sí y con el contexto en el cual surgen, se disipará toda duda respecto a cada uno de los anuncios que refieren a organizaciones armadas. Mientras tanto, sólo restará un acercamiento a este fenómeno, comparándolo, evaluándolo, conociéndolo y tomando la distancia necesaria para disipar toda duda.

jorgelofredo@gmail.com
http://cedema.org 

jueves, 11 de julio de 2013

ERP: la nueva guerrilla mexicana (análisis)


Sin hacer mucho ruido, y usando canales de comunicación serios, la semana pasada supimos del primer comunicado de una nueva guerrilla mexicana: el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), que se autodenomina una escisión del Ejército Popular Revolucionario (EPR). No sabemos el tamaño del grupo que se separa y si es determinante en el equilibrio de fuerzas eperrista, pero sí revela un estado de cosas que pasan en el México rural e insurgente, que pocas veces es conocido por la opinión pública.


No es la primera escisión que sufre el grupo armado: TDR y ERPI fueron primero. Los escindidos de ahora culpan al EPR de mantener una cerrada postura conservadora de los principios marxistas-leninistas y de ser burócratas revolucionarios. Y hacen acusaciones graves, como que el núcleo duro de militantes del EPR persigue a los disidentes y pretende ejecutarlos; así como de que viven “de manera excéntrica, distinta al pueblo”.


Dan a entender que los dirigentes eperristas son tan cerrados que no hablan el lenguaje de los campesinos, ni pretenden hablarlo. “Los compañeros (que ustedes consideran como de medio pelo), decidimos optar por mantener nuestra línea marxista-leninista bajo un lenguaje acorde al entendimiento de nuestras bases.” Y dicen que “para como están las cosas” en el país no pretenden quedarse cruzados de brazos y que buscan impulsar una verdadera revolución.


Ya se defenderá el EPR, vía epistolar, pero por lo plasmado por estos guerrilleros disidentes se desprenden varias consideraciones: que hay un núcleo duro muy conservador el frente del EPR, que se ha hecho viejo;  que en paralelo hay un núcleo campesino con un ánimo de más beligerancia revolucionaria que desea insurreccionarse ya; que tienen un fuerte componente guerrerense, por las referencias al ERPI y a la masacre de Aguas Blancas; que la brecha generacional entre dirigencia y tropa se ha ensanchado con el tiempo y el relevo generacional en la ya vieja guerrilla es probable.


¿Cómo puede esto reflejarse en la cotidianeidad social mexicana? Mediante acciones guerrilleras más espectaculares en los próximos meses, generadas por estos campesinos jóvenes, radicalizados, cansados de ser una guerrilla de papel, muy posiblemente con epicentro en Guerrero, estado al que ya no le falta nada para ser un Estado fallido.


En un mundo globalizado es altamente creíble que las revueltas sociales del mundo, alzadas en contra del neoliberalismo mundial, y aun los anarquistas chilangos que desde el 1 de diciembre pasado no desaprovechan ninguna marcha para descargar lo que llaman su rabia, sean un escaparate y ejemplo envidiable para quienes pretenden cambiar su pobreza atávica por la vía armada.


Esto representará mucho trabajo para los encargados de la seguridad nacional del Estado mexicano en los meses por venir, pero debería ser mucho mayor para los encargados de cerrar la brecha económica y la inequidad social en el país.Mientras eso no se consiga, seguiremos bajo el estigma ya visualizado por Carlos Montemayor, de la guerrilla recurrente, que no ha dejado de existir en el país desde cuando menos 1964.    

 

*Periodista

ajimac@gmail.com

@ajimac

viernes, 28 de junio de 2013

Fundan el Ejercito Revolucionario del Pueblo (ERP); escisión del EPR


Al Pueblo de México,

A los medios de comunicación, Nacional e Internacional.
A las Organizaciones Revolucionarias de México y del Mundo

A un aniversario más de la masacre realizado por el Estado-Burgués en el vado de Aguas Blancas, Guerrero, no se ha hecho justicia a los compañeros caídos de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), masacre perpetuado por intereses caciquiles como el de Aguirre Rivera, priista recalcitrante que se ha envuelto con la camisa de una alianza perversa, que aparenta y presume un gobierno de izquierda, que a cambio sigue la represión y se mantiene la pobreza, la justicia es la ausente en ese Estado, se presume el negocio, se esconde la realidad de la periferia. Desde la montaña urbana y rural, desde nuestra trinchera, nuestra solidaridad a los familiares de los cámaras masacrados. A seguir exigiendo justicia, justicia, justicia.

Saludamos fraternamente a todas las hermanas organizaciones revolucionarias, y damos a conocer el nacimiento del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), tal vez no de la manera “formal” como se debiera de una organización armada, sin embargo, de acuerdo a la valoración política, es necesario que el pueblo conozca de que aun hay hombres libres que están a favor de la clase explotada, marginada, que con el propósito de cambiar nuestro sistema neoliberal somos capaces de luchar por el pueblo y entregar la vida para la noble causa.

La unión de compañeros de varios estados que militábamos y simpatizábamos con el EPR, que por seguridad no damos a conocer, (seguridad hacia el Estado-represor), que derivado de la crisis existente en el PDPR-EPR, fuimos aislados y es marcada la diferencia de carácter metodológico y la línea del PDPR-EPR, así como en algunos compañeros existió el abandono; la mayoría de nuestros militantes y simpatizantes, en su mayoría campesinos, desaprobamos las actitudes, formas y métodos que algunos responsables están ejerciendo en las comunidades, quienes están dividiendo y no unificando los trabajos para la revolución, se está llevando ejecuciones personales, pasando por alto los principios revolucionarios, estas acciones dirigidas desde el escritorio y apoyando a gentes que no tienen un actitud correcta ante la vida, ante la razón se aplica la mentira, la manipulación y se intenta privar de la vida a compañeros con trayectoria en el proceso de la lucha.

El PDPR-EPR es tan cerrada la postura conservadora de los principios marxista-leninista, que cada vez nosotros como campesinos que nos hemos esforzado por poner en la praxis y aprender de nuestros hombres ilustres como lo es MARX, ENGELS, LENIN, MAO, CHE GUEVARA, no vemos un avance real en la tarea revolucionaria, hemos sufrido un retroceso, vimos como se está desmoronando nuestro partido y ejercito, por el centralismo y el autoritarismo, al grado que se ha atomizado el PDPR-EPR. Sin embargo también hemos aprendido que nuestro pueblo los de abajo, los campesinos, los pobres, los explotados y obreros, tienen mucho por enseñarnos, y sin abandonar los principios marxistas-leninistas, también abrazamos a nuestros ilustres nacionales, José María Morelos y Pavón, Emiliano Zapata, Arturo Gámiz, Genaro Vázquez y Lucio Cabañas. Nosotros con apego a la claridad de nuestra realidad social, hemos decidido abandonar las filas del PDPR-EPR y emprender un nuevo proyecto revolucionario, con la certeza de que en su momento tendremos que unir esfuerzos para combatir al Estado-Burgues y echar andar por lo que hoy en día damos la vida, el socialismo. A lo mejor este comunicado se le dará el énfasis de que el ESTADO-BURGUES está metiendo busca pie o nuestro escrito sea parte de la contrainsurgencia. Estamos consciente de que el Estado-represor se reirá, pero es necesario darles a conocer que los que estamos ante la duda de la infiltración del partido que orgullosamente servimos y simpatizamos (PDPR-EPR) por un largo camino, vimos la necesidad de replegarnos e iniciar las observaciones e investigaciones pertinentes, para lo cual le señalamos lo siguiente:

1.- En CH, algunos compas fueron aislados totalmente y señalados como parte del ERPI, cuestión que es mentira, para lo cual el EPR toma como traición, y los responsables utilizan prácticas que en su momento y de manera mutua se hicieron entre EPR y ERPI, ante las investigaciones realizadas nos apegamos más por lo manifestado por el ERPI; de las condiciones existentes en donde tiene presencia el ERP, los compañeros (que ustedes consideran como de medio pelo), decidimos optar por mantener nuestra línea marxista-leninistas bajo un lenguaje acorde al entendimiento de nuestras bases. Ahora nos dirán revisionistas, pero tenemos en cuenta las condiciones de pobreza y el sometimiento educativo hacia el pueblo, es necesario encontrar una metodología de enseñanza del marxismo-leninismo que permita el entendimiento práctico de nuestro pueblo entre la teoría y la praxis. Que en eso estamos.

2.- Entendemos que como parte de la necesidad de restablecer de nueva cuenta una estructura como PDPR-EPR después de la atomización, ustedes han acelerado el proceso de reclutamiento y a los camaradas que tienen dudas y mantienen materiales, pues los están presionando o le hacen juicios sumarios y pretenden liquidarlos, toda vez que la desconfianza hacia ustedes (PDPR-EPR), por la presunta infiltración y la cerrazón en la cuestión metodológica de la aplicación del marxismo-leninismo y la desviación entre lo que se dice y hace, no permite generar confianza hacia los enviados o responsables, por estas motivaciones y otras que consideramos no prudentes manifestar hemos decidido emprender un proyecto revolucionario con una metodología y estrategia distinta al PDPR-EPR. Esta decisión también influye en que varias zonas se están gestando un clima de confrontación y de linchamiento político hacia nuestros compañeros. Por tal razón queremos reiterar nuestro compromiso con la revolución y para la revolución.

3.- No pretendemos restar fuerza al movimiento armado o jugar un papel de divisionistas, pero, como están las cosas en nuestro país, tampoco pretendemos quedarnos cruzados de brazo y esperar que las aguas se aclaren, por eso desde el lugar o espacio que abarcamos, nuestra voz, nuestro modesto esfuerzo y contribución para impulsar una verdadera revolución en nuestro México, estamos en la mejor disposición de esperar el momento para alcanzar una sola vanguardia, una sola unidad y un solo frente que nos lleve hacia el triunfo de la revolución socialista. Hasta en tanto, combatiremos en las filas del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). No es interés protagonizar, pero si pretendemos generar condiciones y contribuir a la Unificación Revolucionaria, bajo una metodología que permita la formación política-militar de nuestro pueblo.

4.- No estamos de acuerdo en confrontar al mismo pueblo, como ustedes (EPR) lo están haciendo en algunos estados, falseando la realidad y alentando la confrontación entre nuestros hermanos campesinos e indígenas; nos manifestamos a favor de una Ética Revolucionaria. La revolución no se hace en contra del pueblo, es en contra del sistema neoliberal imperante, y al pueblo se le forma y concientiza, trabajo que es arduo, que se requiere esmero y es lo que ustedes están evitando, en cambio prefieren acelerar las cosas aunque de por medio exista confrontaciones entre el mismo pueblo. Que quede claro, nosotros actuaremos contra todo aquel que atente o menoscabe el interés del pueblo. La justicia revolucionaria se aplicara contra aquel que pretenda escudarse como seudo revolucionario. Pareciera que ustedes (EPR) colaboran más con el estado que con el pueblo, pareciera que la filtración es manifiesta, no nos tragamos el cuento de algunos que son hasta de hueso colorado marxista-leninista, cuando en nuestras investigaciones realizadas viven de una manera excéntrica, distinta al pueblo, y solo desde el escritorio maniobran, es fácil mandar, pero luchar y actuar junto con el pueblo, es correr el mismo riesgo que el pueblo. Ya basta de burocratismo revolucionario.

Por todas estas aclaraciones y precisiones, desde hoy, públicamente anunciamos la existencia del EJERCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO (ERP).

¡¡Por la Unificación Revolucionaria!!
¡¡Por la Lucha Campesina, Obrera y Popular!!
¡¡Resueltos a Vencer o Morir”
Comandancia General del Ejército Revolucionario del Pueblo.

Republica Mexicana, Junio del 2013 


(Tomado de http://www.cedema.org/uploads/ERP%20COM%201.pdf )